JoyeroUcraniano
Miembro Nuevo
Milei planea un Golpe de Estado engañado por los fachos de su coalición.

Está pasando lo peor en Argentina. Pese a las influencias moderadoras de Patricia Bullrich y Mauricio Macri, se impone de a poco la línea de los virgos libertarios y la militante cavernaria del Opus Dei Victoria Villarruel.
El macrismo intentó evitar esto a dos puntas. Por un lado, intentó hacer soltar sus ideas más retrógradas a Victoria Villarruel yendole por el lado del repudio a las asonadas comunistas del grupo nacional-católico bolchevizante Montoneros. Sin embargo, primó el resentimiento por haberla dejado afuera de la coalición.

Por otro lado, intentó convencer a Milei de que su primer viaje fuera a Davos, a dar un discurso liberal y globalista para convencer a los empresarios del mundo de invertir en Argentina.
Sin embargo, a Milei le llenó la cabeza la facción lefevbrista, Trumpista y nacional-católica de su círculo: Marra, Villarruel e Iñaki, con quien Milei tuvo un affaire homosexual, pero que fue obligado a echar. De hecho los tres fueron desplazados del gobierno gracias a la influencia de Juntos por el Cambio y quedaron resentidos con el Estado de derecho y el empresariado argentino. Dio un discurso incendiario en el Foro de Davos que espantó a los mercados y le sumó desconfianza en LLA a los votantes de Cambiemos.

Los nuevos "aliados" de Milei
Fue el Chavista pobrista y pro-terrorista de Grabois el que supo meter la cuchara, circulando la versión falsa de que la también católica y natalista pero anti-terrorista Villarruel estaba orquestando un golpe contra Milei.

Esto hizo que Milei, quien ya tenía un pacto de impunidad con Cristina para salvarla de los casos de corrupción, vuelva a ver con simpatía a la derecha populista y disgenésica peronista, que ya lo había ayudado en la campaña para vencer a Bullrich y meter a massistas en sus boletas.

Habrá un paro general el día 24, supuestamente contra el decreto y la Ley Habilitante de Milei que lo convertirían en un dictador. El paro estaría encabezado por el gordo corrupto, depravado y pederasta Luis Barrionuevo, quien en los años 90 sugirió que el país podría salir adelante si "nosotros dejáramos de robar por dos años".
A nadie le pasa por alto que Barrionuevo hizo un pacto con Milei en la campaña y está copando con su gente espacios clave como el "Ministerio de Capital Humano". Para colmo, el DNU perpetua el nefasto régimen de obras sociales del que los "gordos" de la CGT se benefician.
Tampoco que la CGT no tiene el apoyo de nadie y su paro ridículo solo puede tener como consecuencia justificar la asonada autoritaria mileista.
El plan es el siguiente: Milei y Barrionuevo buscan un baño de sangre el 24 para dejar en ridículo el protocolo antipiquetes de Bullrich. En base a esta masacre instigada por las patotas peronistas y gente traida de las villas Milei desplazará al macrismo y se convertirá en el Bukele argentino.
¿Por qué caracterizamos esto como un golpe Trumpista contra Milei entonces?

La razón es simple. El DNU de Milei NO TIENE un apoyo mayoritario. Según las últimas encuestas el 53% de la población lo RECHAZA, este porcentaje solo aumentará si se rompe la coalición con la centro derecha progresista y se impone una dictadura.
Para colmo, el protocolo antipiquetes de Bullrich es la mejor salvaguarda del plan de ajuste que debe llevar a cabo Milei. Es decir, no solo se hace pasar un DNU impopular y se impone un nuevo gobierno sin apoyo, sino que se boletea al cuadro MÁS IMPORTANTE para que el gobierno se mantenga.
A Milei le están llenando la cabeza con la idea de que puede cumplir sus fantasías de "salvador de la Argentina" encabezando un gobierno neo-bolchevique que suprima al liberalismo progresista y co-opte al peronismo de las villas y el Conurbano. Esto es INVIABLE ya que el 56% de la población votó a un gobierno LIBERAL que reprima a los revoltosos y deje de joder al sector privado con impuestos. NO VOTÓ un retorno al medioevo ni un alineamiento geopolítico con Rusia, China y Hamás.
El kirchnerismo se relame con la posibilidad de que este enfermo desequilibrado "demuestre" la "inviabilidad" de las consignas liberales y encabece un gobierno débil y fácil de voltear.

Está pasando lo peor en Argentina. Pese a las influencias moderadoras de Patricia Bullrich y Mauricio Macri, se impone de a poco la línea de los virgos libertarios y la militante cavernaria del Opus Dei Victoria Villarruel.
El macrismo intentó evitar esto a dos puntas. Por un lado, intentó hacer soltar sus ideas más retrógradas a Victoria Villarruel yendole por el lado del repudio a las asonadas comunistas del grupo nacional-católico bolchevizante Montoneros. Sin embargo, primó el resentimiento por haberla dejado afuera de la coalición.

Por otro lado, intentó convencer a Milei de que su primer viaje fuera a Davos, a dar un discurso liberal y globalista para convencer a los empresarios del mundo de invertir en Argentina.
Sin embargo, a Milei le llenó la cabeza la facción lefevbrista, Trumpista y nacional-católica de su círculo: Marra, Villarruel e Iñaki, con quien Milei tuvo un affaire homosexual, pero que fue obligado a echar. De hecho los tres fueron desplazados del gobierno gracias a la influencia de Juntos por el Cambio y quedaron resentidos con el Estado de derecho y el empresariado argentino. Dio un discurso incendiario en el Foro de Davos que espantó a los mercados y le sumó desconfianza en LLA a los votantes de Cambiemos.

Los nuevos "aliados" de Milei
Fue el Chavista pobrista y pro-terrorista de Grabois el que supo meter la cuchara, circulando la versión falsa de que la también católica y natalista pero anti-terrorista Villarruel estaba orquestando un golpe contra Milei.

Esto hizo que Milei, quien ya tenía un pacto de impunidad con Cristina para salvarla de los casos de corrupción, vuelva a ver con simpatía a la derecha populista y disgenésica peronista, que ya lo había ayudado en la campaña para vencer a Bullrich y meter a massistas en sus boletas.

Habrá un paro general el día 24, supuestamente contra el decreto y la Ley Habilitante de Milei que lo convertirían en un dictador. El paro estaría encabezado por el gordo corrupto, depravado y pederasta Luis Barrionuevo, quien en los años 90 sugirió que el país podría salir adelante si "nosotros dejáramos de robar por dos años".
A nadie le pasa por alto que Barrionuevo hizo un pacto con Milei en la campaña y está copando con su gente espacios clave como el "Ministerio de Capital Humano". Para colmo, el DNU perpetua el nefasto régimen de obras sociales del que los "gordos" de la CGT se benefician.
Tampoco que la CGT no tiene el apoyo de nadie y su paro ridículo solo puede tener como consecuencia justificar la asonada autoritaria mileista.
El plan es el siguiente: Milei y Barrionuevo buscan un baño de sangre el 24 para dejar en ridículo el protocolo antipiquetes de Bullrich. En base a esta masacre instigada por las patotas peronistas y gente traida de las villas Milei desplazará al macrismo y se convertirá en el Bukele argentino.
¿Por qué caracterizamos esto como un golpe Trumpista contra Milei entonces?

La razón es simple. El DNU de Milei NO TIENE un apoyo mayoritario. Según las últimas encuestas el 53% de la población lo RECHAZA, este porcentaje solo aumentará si se rompe la coalición con la centro derecha progresista y se impone una dictadura.
Para colmo, el protocolo antipiquetes de Bullrich es la mejor salvaguarda del plan de ajuste que debe llevar a cabo Milei. Es decir, no solo se hace pasar un DNU impopular y se impone un nuevo gobierno sin apoyo, sino que se boletea al cuadro MÁS IMPORTANTE para que el gobierno se mantenga.
A Milei le están llenando la cabeza con la idea de que puede cumplir sus fantasías de "salvador de la Argentina" encabezando un gobierno neo-bolchevique que suprima al liberalismo progresista y co-opte al peronismo de las villas y el Conurbano. Esto es INVIABLE ya que el 56% de la población votó a un gobierno LIBERAL que reprima a los revoltosos y deje de joder al sector privado con impuestos. NO VOTÓ un retorno al medioevo ni un alineamiento geopolítico con Rusia, China y Hamás.
El kirchnerismo se relame con la posibilidad de que este enfermo desequilibrado "demuestre" la "inviabilidad" de las consignas liberales y encabece un gobierno débil y fácil de voltear.
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