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Kenya Arif, actriz de Milky Perú, revela cuánto le pagan por escena en cine para adultos en Perú

Shinji Rei 2007

Miembro de Bronce

Trabajó como mesera y ahora es estrella en la industria del cine para adultos, que le ha permitido darle mejor calidad de vida a sus hijas y comprarse una casa.​

Kenya Arif, actriz de Milky Perú, revela cuánto le pagan por escena en cine para adultos en Perú



En la efervescente pero prometedora industria del cine para adultos en Perú, Kenya Arif, una mujer de 31 años, emerge como una de las figuras más talentosas y versátiles del medio. No se trata de una afirmación caprichosa, sino el reconocimiento de expertos en este campo a menudo incomprendido. Kenya es una morena que irradia sensualidad, con una capacidad de flexibilidad asombrosa y un talento histriónico para interpretar una amplia gama de personajes en la cinematografía para adultos.

Kenya Arif, natural de Carabobo, Venezuela, llegó a Perú hace seis años. Su historia refleja la odisea de un millón de migrantes venezolanos, impulsados por la crisis que azotaba su tierra natal, a cruzar la frontera en busca de un futuro más prometedor.

Antes de su llegada a Perú, Kenia y su madre, una oftalmóloga reconocida, habían construido con éxito una cadena de ópticas. Kenya se encargaba de la administración y disfrutaban de una vida cómoda y sin apuros. Sin embargo, el chavismo y sus efectos perniciosos, como la inflación, la escasez y la inseguridad, hicieron que su vida se tambaleara. La ruina se cernió sobre una sociedad que una vez había prosperado.

Fue entonces cuando Kenya Arif, ahora una estrella en las productoras nacionales como Milky, Inka Productions, Xfilms y Onlyfans, emigró a Perú en busca de un nuevo comienzo

La industria del cine para adultos en Perú​

En una conversación con Kenya Arif, nos adentramos en el mundo de la industria del cine para adultos en Perú y en su papel en ella.

Cuando se le preguntó cuánto se paga por un video en Perú, Kenya reveló que por cada escena se puede ganar más que el sueldo mínimo en unas pocas horas. No obstante, al preguntarle cómo se considera a sí misma, Kenya no se coloca etiquetas. No se ve como actriz, sino como alguien que disfruta de lo que hace. Su interés en mostrar su personalidad le llevó a esta profesión, y está contento con ello. Aunque no se considera popular, tiene su propio público y su trabajo llega a un amplio espectro de personas.

Cuando se le pregunta sobre la diferencia entre la industria en Perú y en otros lugares, Kenya señala que no puede hacer una comparación directa, ya que no ha trabajado en otros países. Sin embargo, reconoce que la industria en Perú ha crecido en los últimos años, pasando de una sola productora a tres o cuatro. Aunque la industria peruana tiene potencial, Kenia también destaca una carencia importante: la falta de actores masculinos. Ella enfatiza que no se debe a la calidad, sino a la falta de presencia masculina en un entorno donde prevalecen los tabúes

Kenya Arif tiene aspiraciones de grabar producciones en el extranjero con productoras más grandes y profesionales. Por ahora, su deseo es seguir creciendo en la industria.

En resumen, Kenya Arif es un ejemplo de superación y adaptación en un mundo donde las oportunidades a menudo surgen de las circunstancias más inesperadas. Su historia ilustra cómo la crisis venezolana impulsó a muchas personas a emigrar en busca de una vida mejor, y su éxito en la industria del cine para adultos en Perú es un testimonio de su determinación y talento.







 
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